Hace muchos años que me encanta el fotógrafo Chema Madoz, supongo que me hablo de el Macu, mi profesora de tipografía, ya ha hace más de 15 años.
No amo su pureza técnica o el proceso de trabajo que tiene, lo que verdaderamente me maravilla de este artista ,es su manera de cazar milagros cada día, de ver belleza en los objetos comunes , de hacer poesía sin quererlo y fascinarse con la sencillez del día a día.
Hacer cosas grandes desde la humildad.
El dice que nunca ha tenido una crisis creativa, porque no se aburre, un hombre que todavía se sigue maravillando, será por esa capacidad de disfrutar de lo pequeño, de hacer grande lo que nos rodea, de ver con profundidad.
Me siento muy identificada con el, al ver sus exposiciones me encantaría haber disparado esas fotos yo, me vibra su mensaje, me siento acompañada por el mensaje que escucho, en el documental que proyectan en la sala de exposiciones .
Me conecta con pensamientos profundos sobre lo rápido que vamos, la paradoja de ver pero no mirar ,de oír pero no escuchar y esa idea, de que gran parte del tiempo sobrevivimos y no vivimos.
Pensar que la felicidad siempre esta un poco mas adelante, es un engaño mental, no es una fecha señalada, no es la próxima hoja del calendario, nos olvidamos de andar el camino,de disfrutar, respirar y aprovechar lo que esta sucediendo ahora.
Volver a recordarlo, es un trabajo diario.
No quiero guardar la vajilla para cenas especiales , no quiero ropa de Domingo, comeré hoy el último pedazo de la tarta y me tomare la ultima, aunque este muy cansada.
No existe mañana y aunque cueste sentirlo asi , es la única verdad y sigo viviendo sencillamente y atenta, porque los milagros están allí, esperando que los veas, que los sientas y que algunos afortunados los transformen en arte.
Si os gusta la fotografía, si os gusta la poesía visual si os gusta Chema Amadoz un buen plan es visitar la Lonja de Zaragoza y RODEAROS DE BELLEZA.